26 diciembre 1954 – 18 septiembre 2023
El Padre Philip Endean SJ, de la Provincia Británica de la Compañía de Jesús, fue un viejo amigo de la CJ, tanto en el Reino Unido como en la CJ en general. Su relación con la CJ comenzó con la Congregación General de 1993, a la que fue invitado por la entonces Superiora General, Hermana Michael Pelli, y su equipo, para presidir. Fue un acto de fe en alguien que entonces tenía menos de 40 años, pero un acto de fe que resultó ser acertado.
Además de su gran intelecto, Philip también aportó a esa CG, y a todos sus tratos con la CJ, su fluidez en múltiples idiomas y, no menos importante, su amor a Mary Ward. Posteriormente se le pidió que presidiera la CG de 2002, en la que se tomó la decisión de solicitar a la Santa Sede permiso para tomar las Constituciones Jesuitas completas, junto con el cambio de nombre, por los que Mary Ward había luchado tanto pero sin éxito en su día. El incomparable conocimiento y amor de Philip por la espiritualidad ignaciana, por los Ejercicios Espirituales y por las Constituciones, contribuyó enormemente al discernimiento de aquella trascendental decisión de la CG 2002, que fructificó con el Decreto de la Santa Sede de junio de 2003, permitiendo la adopción de las Constituciones Jesuitas en su totalidad, junto con el cambio de nombre a Congregatio Jesu.
Durante la última década, que coincidió con su traslado al Centro Jesuita de Sèvres en París, como profesor de teología, Philip trabajó con nuestras Provinciales europeos y luego, a partir de 2019, como parte del equipo de facilitación que preparaba la CG 2021-22, que, por supuesto, debería haber tenido lugar en 2020. Cuando tuvo lugar la primera parte de la CG, en línea, durante julio y agosto de 2021, ya se le había diagnosticado el cáncer del que falleció el 18 de septiembre de 2023. Sin embargo, pudo seguir formando parte del grupo preparatorio de la CG y asistiendo a las sesiones online de la CG de 2021, donde su contribución a la hora de unir los hilos de las sesiones online de cada día de una manera explícitamente ignaciana, fue enormemente apreciada, como lo fueron sus silenciosas pero siempre reflexivas y útiles contribuciones a las sesiones plenarias. Lamentablemente, a medida que su cáncer avanzaba, se hizo evidente que su salud no le permitiría asistir a la sesión electiva de la CG en agosto-septiembre de 2022, donde su ausencia como nuestro «espejo ignaciano» se hizo sentir.
Encomendamos a Philip al infinito amor y misericordia de Dios con gran gratitud por su contribución a la vida de la CJ en los últimos 30 años. Que descanse en paz, habiendo cumplido con creces las palabras de Mary Ward, de «permanecer firmemente en el servicio de Dios hasta el fin…»
26 de septiembre de 2023
Jane Livesey CJ
