Durante su visita a Hungría con motivo del Congreso Eucarístico Mundial, el Papa Francisco también rindió un homenaje especial a las hermanas de la Congregatio Jesu.
Durante un encuentro con los obispos húngaros, el domingo 12 de septiembre de 2021, el Papa rindió un homenaje especial a la Congregatio Jesu. Había conocido personalmente a algunas de las hermanas húngaras en Argentina. Muchas hermanas tuvieron que abandonar Hungría durante la dictadura comunista. En Plátanos, cerca de Buenos Aires, fundaron un colegio Mary Ward y construyeron otras misiones.
©Sr. Brigitta Barnai CJ
«He aprendido mucho de su valentía, su coraje, su paciencia y su amor por la patria; han sido un testimonio para mí», dijo el Papa Francisco en la recepción, según un informe de Vatican News. «Al mencionarlos hoy aquí, también quiero rendir homenaje a los muchos hombres y mujeres que tuvieron que exiliarse o incluso dar su vida por la patria y la fe».
Además, el Papa Francisco animó a los obispos húngaros a renovar su vigor en el anuncio de la fe. Al hacerlo, no deben aferrarse a las instituciones o estructuras, sino ser «mensajeros de la alegría» que buscan «nuevas formas» de predicar, dijo Vatican News. Al hacerlo, deben involucrar a todos los miembros de la Iglesia, especialmente a los laicos: «No tengáis miedo de dar espacio a la palabra de Dios y de implicar a los laicos.
La Hna. Veronika Fuhrmann CJ, miembro del Consejo Provincial de la Provincia de Europa Central de CJ, que es responsable del cuidado de la parte húngara de la Provincia, se alegró junto con sus compañeras de Hungría: «Es bueno experimentar que los grandes sacrificios personales hechos por nuestras hermanas durante el tiempo de la persecución son honrados de esta manera. El valor y la perseverancia de nuestras predecesoras nos inspiran hasta hoy».
©Sr. Brigitta Barnai CJ
Lea más sobre el discurso del Papa Francisco en Vatican News: https://www.vaticannews.va/de/papst/news/2021-09/papst-franziskus-reise-ungarn-slowakei-budapest-bischoefe-dialog.html and https://www.vaticannews.va/en/pope/news/2021-09/pope-hungary-discourse-bishops-full-text.html
Contexto
La emperatriz María Teresa invitó a la Congregatio Jesu a ir a Hungría, por lo que las primeras hermanas llegaron allí en 1770. Se hicieron cargo de la reliquia de San Esteban en Buda y abrieron un colegio. Unos años más tarde, se trasladaron a Pest, al otro lado del Danubio, donde todavía viven.
Durante casi 200 años dirigieron una escuela y un instituto de formación de maestros, una escuela comercial y un internado. En el momento de la secularización, 430 hermanas enseñaban a unos 6.000 niños en siete escuelas.
Durante el régimen comunista, las escuelas fueron cerradas, las casas confiscadas y las hermanas expulsadas. Algunas hermanas continuaron su labor en la clandestinidad y enseñaron religión. Otras hermanas tuvieron que huir y fundaron una nueva misión y una escuela en Plátanos, Argentina.
Hoy en día, algunas hermanas húngaras trabajan como profesoras, otras como guías espirituales, en el trabajo con jóvenes, en la pastoral parroquial y en las misiones contra el tráfico de personas.
Hay pequeñas comunidades en Budapest, Eger, Piliscaba y Veszprém. Desde 2017, Hungría pertenece a la Provincia de Europa Central (PEM).
Tras la fundación en Plátanos, la CJ en Argentina también creció. Hoy, las hermanas viven en Plátanos, San Andrés de Giles, Cerritos y El Caburé. Trabajan especialmente como profesoras y en otros proyectos educativos, en el sector de la salud, se dedican al trabajo social, al acompañamiento espiritual y a la atención pastoral.
